Lucas Carrasco-. Llevo muchos años aguantando golpes de la corporación política y periodística. Y sin embargo, resucito y resucito. Nací para romper las pelotas.
Pablo Mori-. Con la humildad -de convocatoria- que los caracteriza, se realizó en la Plaza 1º de Mayo de Paraná una concentración para manifestarse en contra de los aumentos en los servicios públicos.
Lucas Carrasco-. Servido en bandeja, el gobernador de Entre Ríos, Leonardo Simons, se confía demasiado en que ningún rival en la interna peronista se animará a disputarle el trono en su camino a la reelección. Se confía tanto que se acuesta, dócil y con aroma a Romero y limón, como un lechón a las brasas, quemado lentamente, en una bandeja esperando ser devorado.
Lucas Carrasco-. Macri intervino el Partido Justicialista a través de la siempre servil Servini de Cubría. Es mucho, ¿no?
Borracho de poder, es probable que Macri se haya ido, esta vez, a la mierda. Y como en otras ocasiones, tenga que retroceder. El problema es cómo hacerlo sin calcular las víctimas, sin un control de daños, que le garantice no quedar (más) pegado al último papelón de los fiscales morales de la república, que siempre terminan mostrando la hilacha.
Lucas Carrasco-. Se empieza con los mejores, se termina con los incondicionales. ¿Es una ley de la física? No. Ni siquiera es una ley de la Ciencia Política. Es nomás -como si fuera poco- una constante de la historia argentina desde 1916 hasta la fecha.